Cordialidad y buena sintonía en el primer encuentro entre Asaja y el Director General del Medio Natural de la Junta de Andalucia
Representantes de la organización agraria de prácticamente todas las provincias andaluzas pudieron exponer a Ángel Sánchez las cuestiones forestales y medioambientales que más preocupan en este momento al sector.
El primero de los encuentros entre representantes de Asaja de toda Andalucía, -entre ellos, la vicepresidenta de Asaja-Huelva, Rocío Acosta, y el jefe del Departamento de Medio Ambiente, Forestal y Caza de la organización onubense, Antonio González- , con el nuevo director general de Medio Natural, Biodiversidad y Espacios Protegidos de la Junta de Andalucía, el también onubense Ángel Sánchez, estuvo marcado por la cordialidad, el entendimiento y una buena disposición a la cooperación que todos los asistentes coincidieron en señalar que era algo de lo que había adolecido, lamentablemente, la anterior etapa.
Representantes de Asaja-Andalucía y de las provincias de Cádiz, Jaén, Sevilla, Málaga, Córdoba y Huelva pudieron exponer las cuestiones forestales, cinegéticas y medioambientales que más afectan a cada provincia dependiendo de sus particularidades y realizar, así mismo, un repaso de los asuntos más urgentes a nivel autonómico.
Entre ellos, destacan el estado actual administrativo de las ayudas forestales, la necesaria simplificación burocrática que agilice la relación con la administración y propicie un desarrollo más ágil del sector, la unificación de criterios entre las distintas provincias, el impulso definitivo a una cuestión de la importancia de los Planes de Gestión de Integral de las Dehesas, injustificadamente atrasados. También se trató la necesidad de sacar a la luz de una vez por todas el decreto para la regulación de la recolección y aprovechamiento de las setas silvestres en nuestra comunidad autónoma, pendiente desde 2005.
En el caso concreto de Huelva, se trató la necesidad de establecer el modelo de gestión selvícola para plantaciones de eucalipto y aunque se trate de un asunto que afecta a otras muchas zonas de la comunidad autónoma, se planteó la problemática que en muchas ocasiones suponen los espacios naturales a la hora de desarrollar la actividad forestal, cinegética y otras propias de estos sectores. En muchos casos, los propietarios manifiestan el lastre que les supone desarrollar su actividad en un entorno protegido, en lugar de suponer un valor añadido para su actividad y sus producciones, que sería lo más lógico y deseable.