Reunión con el SEPRONA para garantizar la legalidad y la seguridad en materia de caza
Asaja Huelva ha participado en la última reunión mantenida con el Servicio de Gestión del Medio Natural de la Junta de Andalucía, Aproca, la Federación Andaluza de Caza y el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (SEPRONA), con el objetivo de mantener la línea de colaboración en materia de seguridad, en este caso en lo referido a normativa y novedades en materia de caza.
En este encuentro técnico, los responsables del SEPRONA destacaron que, a partir del 1 de julio y en aplicación de la reforma de la reforma del Código Penal, la caza en los terrenos no cinegéticos puede llegar a ser constitutiva de delito y por tanto tramitarse por la vía penal, una novedad que Asaja Huelva quiera transmitir a todos aquellos que se dediquen a la actividad cinegética. En este sentido, hay que señalar también que la tenencia de especies no cazables puede ser también delito tras la reforma Penal, por lo que se advierte de que ni siquiera se pueden recoger pollos de milano, águila o cualquier otra especie y trasladarlos al domicilio particular ni aunque sea con la voluntad de sanarles de alguna dolencia. También se trató la problemática de las capturas ilegales de conejos en las Marismas del Tinto y en zonas próximas a la capital. Ante todo ello, la recomendación general que se establece es llamar al 062 ó 112 ante cualquier situación de este tipo.
Sobre las cacerías que afecten a caminos de uso público y el conflicto que se produce en la determinación de la titularidad, que casi siempre se investiga a posteriori por la inexistencia de registros e inventarios en la mayoría de los ayuntamientos, Asaja Huelva se compromete a advertir a sus asociados a través de la web de que se aseguren sobre la titularidad de los caminos antes de cazar, con la recomendación de la mejor vía es consultar por escrito al Ayuntamiento en cuestión.
Otro tema de interés fue la distinción entre los distintos tipos de guardería que se existen y las atribuciones de cada uno de ellos. En el encuentro técnico, quedó de manifiesto que los únicos que tienen competencia para pedir documentación, etc… es el cuerpo de la Guardería Rural. Todos los demás son vigilantes de un coto o finca pero no están capacitados para pedir documentación a nadie. Es decir actúan como un ciudadano más y sin gozar por tanto de la presunción de veracidad en la palabra, ni mucho menos portar armas. Se han dado casos en Huelva de este tipo que puede ser considerado como intrusismo profesional. Ante cualquier duda se debe consultar la Ley Orgánica 2/86 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y la Ley 5/2014 de Seguridad Privada. Y por supuesto el tipo de contratación que se le haga a esa persona (no puede estar como peón de campo o tractorista).
Asimismo, se destacó que la prioridad de la Guardia Civil en cuanto a la caza mayor es la seguridad en el desarrollo de las actividades cinegéticas (ganchos, monterías y batidas), y el control sanitario de los subproductos de caza de origen orgánico (vísceras y despojos de los animales cazados). En relación a este tema, se trató el caso de la comarca de Doñana y el riesgo que supone el uso de rifles en las monterías al ser una zona muy llana, por eso solo se autoriza con escopeta.
Finalmente, desde Asaja Huelva destacamos la importancia de este tipo de reuniones técnicas para colaborar con la Guardia Civil y el resto de entidades implicadas, a fin de que las actividades en el campo, en este caso la caza, se desarrollen en las mejores condiciones posibles y con todas las garantías legales y de seguridad.
